En multitud de ocasiones buscamos respuestas a nuestras experiencias fuera de nuestro ámbito de influencia, sin darnos cuenta que todas están en nuestro interior. La búsqueda de nuestra realidad, y el motivo por el que nos encontramos en ella, pasa por la verdadera consciencia de las respuestas que damos a cada situación que se nos plantea. Darnos cuenta que somos los responsables de las consecuencias de nuestros actos. La forma en la que tomamos las decisiones que nos marcarán el camino que queremos seguir, resulta tan importante como la propia decisión. Este planteamiento se transcribe en la historia que abordamos, a través de figuras que simbolizan distintas características. Todas y cada una de ellas vienen a ser reflejo de algunos estereotipos muy marcados en nuestro entorno, y de las que podemos sacar un gran aprendizaje, tanto en aspectos positivos como en aquellos que nos puedan alejar de nuestro verdadero desarrollo personal. Una misma historia con tantas interpretaciones como lecturas pueda tener. Un espacio abierto a la comprensión y adaptación de la realidad singular de cada lector, que tendrá total libertad para realizar su propia composición de las distintas situaciones que se plantean en el libro.