Toni nace en 1947 en Calahorra, en una familia de agricultores, y es el menor de siete hermanos. Sale a San Sebastián con motivo del servicio militar, y ya no vuelve a su pueblo más que puntualmente a visitar a la familia. De San Sebastián se va a Barcelona, donde una combinación de alcohol, prostitución y desarraigo casi pueden con él, pero renace en una playa de Menorca y a partir de allí su vida se reparte entre los veranos en la isla y los inviernos vagabundeando por la península. Más tarde se asienta entre Barcelona y Sant Pol de Mar, y finalmente en Tarragona, donde le diagnostican el sida. Está a punto de morir, pero contra todo pronóstico se cura y vive siete años más, quizá los más creativos y luminosos de su vida, dedicándose entre otras cosas a contar cuentos, y entre ellos el gran cuento de su propia vida, que escribe en este libro y escenifica en una obra de teatro, que se representa una docena de veces, en Tarragona, Reus y Barcelona.