Desde pequeña, a Neus le gustaba imaginar historias de fantasía a todas horas. Veía retazos de ellas en sus sueños. Vivía miles de aventuras dentro y fuera de su cabeza. Así que pronto empezó a plasmarlo todo mediante palabras en libretas y post-it, para que sus relatos no fuesen olvidados. Necesitaba compartir sus historias con los demás y darles la oportunidad de que las disfrutaran tanto como lo hace ella cada vez que las imagina o las lee.