Juan Luis nació en Avilés, pero a los cinco años su familia se trasladó a Alcalá de Henares, donde permaneció más de medio siglo. Estudió en la ciudad cervantina. Y finalmente regresó a su Asturias natal tras una carrera profesional en el mundo de las multinacionales. Su corazón, a día de hoy, sigue dividido por las dos ciudades, pero recuerda un popular refrán asturiano que reza lo siguiente: «uno es de donde pace y no de donde nace».
Es aficionado a la lectura de novela histórica y policiaca, sin desdeñar incursiones en la pintura al óleo, todo desde una placentera posición de amateur.
En su juventud realizó algunos relatos cortos, en principio para satisfacer su necesidad de que en un futuro cercano escribiría una novela. Y efectivamente el futuro llegó, pero fue lejano, y transcurrieron más de treinta años después de pensar en escribir su novela, la madurez le dio el empujón necesario para llevar a cabo su deseo. Su ópera prima, El actor ecuánime.