Jg. Osto nace en Sevilla en 1955. Tuvo que emigrar con sus diez hermanos y los padres a Madrid tras arruinarse el negocio del abuelo.
Va de un lugar a otro, teniendo que robar para poder comer la familia, escapando por las noches de los alquileres impagados. Empieza a trabajar a los trece años buzoneando propaganda. A los quince entra de botones en Wagons-Lits Cook, compañía de coches camas. Más tarde, forma parte de la plantilla Toys, junto a tres hermanos, donde decoran muñecos de escayola.
Sobre los dieciocho entra en el mundo de la política. Corrían los convulsos años setenta: agonía del franquismo, legalización de los partidos políticos, ETA, IRA y las Brigadas Rojas actúan brutalmente, masacre en las Olimpiadas de Múnich, Jomeini se hace con el poder en Irán, coletazos finales de la guerra de Vietnam.
España vive en la posibilidad de una sociedad diferente: libertad sexual, contracultura fascista, efervescencia de una sociedad vital.
Europa en los años setenta aun cuenta con Grecia, Portugal y España como países con dictaduras. Jg. Osto, junto a dos hermanos, son detenidos por la policía y encarcelados en el llamado «Palacio del terror franquista», los sótanos de la Puerta del Sol.
Fuera, España es contemplada como el país de las tres «S»: Sexo, Sea y Sun.
El autor de estos poemas se sumerge en dos obsesiones temáticas que recorren el libro: la familia y las gentes. Desde este ángulo perfila, sin temor a lo esperpéntico, los renglones donde construye los poemas.
El poema es la liberación interna (aunque solo sea por un instante) de quien escribe. Quizás de forma más rotunda aquí se vivifica la incapacidad capaz del encuentro con el alivio del alma.