Nací en Barcelona en 1972 pero, a los 10 años, mi padre optó por un traslado a las islas Canarias, donde sigo desde entonces. Introvertida hasta límites insospechados, a los dieciséis años encontré el escondite perfecto en los libros y comencé a soñar en ellos. Con el tiempo usé la escritura como desahogo, pero ha sido El destino de Elena el que me ha hecho querer compartir mis sueños con el mundo.
Madre de dos soles que me dan la vida, ocupo el poco tiempo que me queda del día, mientras espero en el coche, a las puertas del colegio, a escribir.
Actualmente trabajo en un pequeño negocio familiar… y sigo soñando con poder salir algún día de mi complicada vida.