David Aranda Campín, hacedor e inventor, ha sacado tiempo, del poco del que dispone, para poder escribir y narrar esta historia que tenía en mente desde hace casi treinta años. Inquieto por naturaleza, ha sabido moverse dentro del lenguaje escrito de esta aventura con mucha imaginación, destreza y agilidad. Aragonés y cabezón, les invito a descubrir su ópera prima, después de todo el tiempo que ha tenido para pensar en ella y narrar elocuentemente una historia que a nadie dejará indiferente. Amigo de sus amigos, gran conversador, un metro ochenta y cinco de persona afable que a sus cincuenta años, continúa sacando ese tiempo, que no tiene, para seguir escribiendo.
Las Ilustraciones de esta aventura corren a cargo de uno de los mejores tatuadores de este país, Víctor Cala. Además, Eus Barrera ha colaborado mano a mano con David en la consecución de la obra.
Esta obra está dedicada a todas aquellas personas que se sientan identificadas con la perseverancia, la honestidad, el sacrificio y las buenas acciones. Sin este tipo de personas, no existirían los unicornios.