Autor

Mi nombre es Irene, sureña nacida hace 26 años, siempre me ha caracterizado esa sensibilidad por las injusticias sociales y una inexplicable necesidad de actuar en consecuencia. Quizás fue esto lo que me llevó a estudiar Educación Social en la Universidad de Granada, cuyo grado finalicé en 2014, y a dedicarme al trato directo y afectivo con las personas. Sin duda, un oficio bastante vocacional y sensitivo que ha conectado siempre con mi personalidad.

Mi formación siguió en la ciudad de Lorca hasta que finalicé el máster de Dirección y Gestión de Programas Sociales.

Hace dos años me aventuré a salir del nido y realizar un voluntariado de un año al sur de Inglaterra. Ahora se ha convertido en mi segunda casa, en la que me he dejado atrapar tanto por personas como por mi trabajo dedicado a jóvenes con autismo y enfermedades mentales del que aprendo cada día.

Todo este conjunto de poemas es lo que he ido recogiendo y puliendo principalmente desde que tomé aquella decisión de cambiar de país. Desde entonces siempre elijo la misma: salir de donde me siento cómoda es lo que me mantiene en movimiento y, por lo tanto, me hace sentir un poco más viva.

Buscar maneras de exteriorizar cada emoción surgida, positiva o negativa, me ha acompañado desde tempranísima edad. Casi como una especie de necesidad, siempre he escrito para mí misma, nunca más allá de cualquier otro propósito.

Al final, no es de extrañar que me haya decido a que un pedacito de mí salga a la luz. Cuando algo te emociona, tienes la necesidad de contárselo a todo el mundo.

5/5
Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Share on pinterest
Share on whatsapp